La Frase Egoísta de Brené Brown que Aumentó Mi Paciencia en un 80%.
Una teoría sobre la vida que te volará la cabeza.
¿Crees en las casualidades?
Yo no.
Creo en las CAUSALIDADES.
Y hoy, justo cuando planeaba escribir sobre una de las personas que más me inspiran, Brené Brown, descubrí que ambos publicamos nuestros libros con el mismo sello editorial en España.
Las causalidades nos unen
Creo que, al final, las personas que pensamos parecido terminamos conectando de alguna manera. (En esa conexión esta la clave de la felicidad, ahora más adelante verás porque :-)
Por eso, si este artículo llegó a ti, no creo que sea una casualidad, sino una CAUSALIDAD.
Puede que estés en un momento de tu vida en el que necesitas leer esto.
Hoy quiero compartirte algo que aprendí de Brené Brown, algo que aumentó mi paciencia y redujo mi ira.
Estoy seguro de que, si lo aplicas, también puede transformarte.
La egoista frase de Brené Brown que cambió mi vida
Antes, mi ambición me definía (y, en parte, sigue siendo así).
Como dijo el Papa Francisco: “Sueña en grande, porque, aunque te quedes a mitad de camino, siempre llegarás más lejos que si tus sueños fueran pequeños”.
Pero esa ambición tenía un lado oscuro: me hacía impaciente.
Pero no es una frase hecha, impaciente de verdad, de darme ardor de estomago y ponerme morado de rabia. (Incluso colitis)
Cuando las cosas se retrasaban o las personas no cumplían con mis altas expectativas, me frustraba.
Y, lejos de ayudarme a alcanzar mis metas, esa actitud las retrasaba. Hasta que descubrí esta poderosa frase de Brené Brown:
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